-Lo peor es cuando sabes que tienes un problema pero lo ignoras, porque así es “más fácil”. Muchas veces pensé en renunciar porque me hacía enfrentarme a situaciones con las que no quería lidiar. El proceso no es fácil, puede ser tardado, pero es muy liberador sentirte capaz de afrontar tus problemas y entender por qué eres o actúas de tal manera y corregirlo para ser una mejor versión de ti mismo.
-Desde hace un par de años, sentía mucho dolor al intentar la penetración durante las relaciones sexuales, lo que provocó problemas con mi pareja e incluso de autoestima. Acudí con una ginecóloga que minimizó el dolor y su tratamiento no fue el adecuado ya que mi problema no era físico sino más bien mental. Hace 3 meses tuve mi primer consulta con Lucía, fue bastante claro desde el comienzo, con sus consejos y ejercicios, fui aclarando muchas dudas que tenía y sobre todo deshacerme de miedos. Si estás en una situación similar, no lo pienses mucho y decídete a buscar ayuda. Para mí lo más difícil fue dar ese primer paso. Una vez encaminada, todo fluyó de forma muy sencilla.
-Buscaba, de manera compulsiva en las mujeres y en el sexo, el cariño que yo sentía insuficiente en mi vida y encontraba la manera de sentirme bien aunque fuera momentáneo. Las sesiones me ayudaron a darme cuenta, que detrás de todo esto, estaba en una depresión de años y un resentimiento muy grande hacia mi padre. Con los ejercicios, la introspección y la guía de Lucía, hubieron cambios importantes en mi vida para bien, y aunque de vez en cuando hay días nublados, ya cuento con las habilidades para reconocerlos y tomar acciones para seguir disfrutando de la vida plenamente.
-Mi experiencia en consulta en línea fue práctica, debido a que en cualquier lugar que contara con internet podía tomar mi cita. Me encuentro muy agradecida con Lucía, pues con ella pude sentirme cómoda y abrirme totalmente para que empleara en mí sus conocimientos, a pesar de que varias amigas me decían que eso no serviría, que no hay nada como lo presencial. Puedo compartirles a aquellas personas que están dudando en tomar terapia en línea, que sí se puede. Que teniendo disposición de ambas partes para coordinarse por las múltiples actividades, que todo se puede, tan así, que hoy concluí satisfactoriamente mi terapia en línea.
-Estoy muy agradecida porque recibí el apoyo que necesitaba en un momento crítico de mi vida. A través de un genuino interés por ayudar, empatía y una gran capacidad para crear un diálogo constructivo, Gibran supo acompañarme para encontrar mis respuestas. En lo personal, considero que lo más valioso de este proceso fue su habilidad para ayudarme a identificar mis fortalezas y construir sobre ellas para resolver o incluso mirar con otros ojos los retos que tenía enfrente.
-Gibran fue parte crucial en un proceso donde necesitaba recuperar mi autoconfianza. Siempre respetuoso y amable, logró generar un vínculo que nos permitiera formar soluciones viables a los escenarios que me dieron conflicto. Al día de hoy sigo empleando lo que con él conseguí, y le estoy sumamente agradecido por haberme orientado y apoyado.
-Mi familia fue el principal motivo por el cual acudí a sesión, ya que está pasando por un proceso que me costaba comprender y aceptar. Con Gibran me sentí en confianza para contarle cosas personales sobre lo que estaba viviendo, y hablar del problema me ayudó a ver distintos puntos de vista. Fui capaz de cambiar algunas actitudes de mi parte que detonaban peleas con algunos miembros de mi casa. Mi experiencia en general fue muy buena ya que me sentí en confianza para hablar de temas que me importan, y jamás me sentí juzgada o incómoda.